Palabra de Dios 13 de junio de 2025. SAN ANTONIO DE PADUA, Presbítero y Doctor de la Iglesia.
Evangelio del dia.
PRIMERA LECTURA.
Segunda carta de san Pablo a los corintios ( 4, 6-15 )
Hermanos: El mismo Dios que dijo: Brille la luz en medio
de las tinieblas, es el que ha hecho brillar su luz en nuestros
corazones, para dar a conocer el resplandor de la gloria de Dios,
que se manifiesta en el rostro de Cristo. Pero llevamos este
tesoro en vasijas de barro, para que se vea que esta fuerza tan
extraordinaria proviene de Dios y no de nosotros mismos.
Por eso sufrimos toda clase de pruebas, pero no nos
angustiamos. Nos abruman las preocupaciones, pero no nos
desesperamos. Nos vemos perseguidos, pero no desamparados;
derribados, pero no vencidos.
Llevamos siempre y por todas partes la muerte de Jesús en
nuestro cuerpo, para que en este mismo cuerpo se manifieste
también la vida de Jesús. Nuestra vida es un continuo estar
expuestos a la muerte por causa de Jesús, para que también la
vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. De modo que
la muerte actúa en nosotros, y en ustedes, la vida.
Y como poseemos el mismo espíritu de fe que se expresa en
aquel texto de la Escritura: Creo, por eso hablo, también nosotros
creemos y por eso hablamos, sabiendo que aquel que resucitó a
Jesús nos resucitará también a nosotros con Jesús y nos colocará a
su lado con ustedes. Y todo esto es para bien de ustedes, de manera
que, al extenderse la gracia a más y más personas, se multiplique
la acción de gracias para gloria de Dios.
Palabra de Dios.
SALMO.
Salmo ( 115 )
R. Invocaré, Señor, tu nombre.
Aun abrumado de desgracias, siempre confié en el Señor.
Aun cuando en mi aflicción pensaba: “Los hombres son unos
mentirosos”.
R.
A los ojos del Señor es muy penoso que mueran sus amigos.
De la muerte, Señor, me has librado, a mí, tu esclavo e hijo de
tu esclava.
R.
Te ofreceré con gratitud un sacrificio e invocaré tu nombre.
Cumpliré mis promesas al Señor ante todo su pueblo.
R.
EVANGELIO.
Evangelio según san Mateo ( 5, 27-32 )
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Han oído ustedes
que se dijo a los antiguos: No cometerás adulterio; pero yo
les digo que quien mire con malos deseos a una mujer, ya cometió
adulterio con ella en su corazón. Por eso, si tu ojo derecho es para
ti ocasión de pecado, arráncatelo y tíralo lejos, porque más te vale
perder una parte de tu cuerpo y no que todo él sea arrojado al lugar
de castigo. Y si tu mano derecha es para ti ocasión de pecado,
córtatela y arrójala lejos de ti, porque más te vale perder una parte
de tu cuerpo y no que todo él sea arrojado al lugar de castigo.
También se dijo antes: El que se divorcie, que le dé a su mujer
un certificado de divorcio; pero yo les digo que el que se divorcia,
salvo el caso de que vivan en unión ilegítima, expone a su mujer
al adulterio, y el que se casa con una divorciada comete adulterio”.
Palabra del Señor.
SAN ANTONIO DE PADUA.
Hacia 1195 nació en Lisboa. Para 1221 se encontraba ya en
Asís, junto a san Francisco, cuyo proyecto de vida evangélica lo
atraía mucho. Por sus dotes extraordinarias de predicador, fue
enviado a Francia, en donde se difundían doctrinas heréticas
(los cataros). Fundó un convento en Francia y, cuando volvía
a Italia, murió en Padua, después de predicar ahí mismo los
sermones de Cuaresma (1231).