La Pastoral social, una excelente prueba para la Iglesia.

La Pastoral social, una excelente prueba para la Iglesia.

Acerca del autor

Temas relacionados

1 Comentario

  1. Pedro Peredo Ferrnàndez

    Estimado Juanito:
    De veras que me da mucha alegrìa y gusto al darme cuenta que en la pàgina de todos
    ya estès motivando a la preparaciòn en todas sus formas de la prioridad que mañana
    darà inicio de PASTORAL SOCIAL.
    Efectivamente coincido contigo en lo que te ha llamado la atenciòn de la presentaciòn de la campaña de PASTORAL SOCIAL, hecha por nuestro Señor Arzobispo: Sin reflexiòn de la Palabra y sin la recepciòn de los Sacramentos, Reconciliaciòn y Eucaristìa, no habrà pràctica de la caridad en su màs amplio sentido de la palabra.
    Yo añadirìa el imperativo con el que Cristo termina de narrar la paràbola del Buen Samaritano: VE Y HAZ TU LO MISMO (Lc 10,37).
    Sinceramente, si el amor de Dios que hemos experimentado y que ha sido derramado en nuestros corazones no està bien cimentado, bien firme, bien arraigado, creo que no se va a hacer gran cosa en esta Pastoral.
    Por lo cual, pienso que el principal esfuerzo que se debe poner de todos los que formamos la Iglesia y principalmente de quienes pensamos trabajar en esta Pastoral debe orientarse a estos objetivos:
    a) Experimentar de una manera profunda y constante el amor que Dios nos da y nos tiene;
    b) Que nuestra oraciòn y vida sacramental sea consciente y convencida que somos instrumentos eficaces de Dios para que los beneficios que Cristo nos trajo sean aprovechados por todos, principalmente por los màs necesitados, sus hijos predilectos: los pobres, los marginados, los enfermos, los privados de su libertad, los que andan fuera de casa, los que tienen hambre y sed de pan y de justicia.
    c) La lectura orante de la Palabra, reflexionada para sacar de ahì todo lo que necesitamos para hacer vida ese difìcil imperativo de Cristo, que nos va a cuestionar no ùnicamente el año de la Campaña de Pastoral Social, sino durante toda nuestra vida.
    Juanito, què bonito va a ser trabajar por nuestros hermanos que sufren; què bonito va a ser poder llevar el consuelo de Dios a nuestros hermanos que lloran; què bonita va a ser que formemos el ejèrcito de los hijos de Dios que llevemos pan y agua a tantos hermanos nuestros que tienen hambre y sed.
    Que el Señor derrame abundantes bendiciones sobre nuestros propòsitos y nos conceda cumplirlos como èl nos los ha inspirado.
    Flicidades y Saludos.
    Te reitero mis oraciones a tì y a tus colaboradores.
    Pedro Peredo Fernàndez.

    Responder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.