Milagros Eucarísticos  Offida, 1273                         “Derramando su Sangre”

Milagros Eucarísticos Offida, 1273 “Derramando su Sangre”

Milagros Eucarísticos

Offida, 1273

“Derramando su Sangre”

 Milagro-de-Offida

El Señor permitió el ser nuevamente atraído a Lanciano. Esto podría muy bien ser llamado el Milagro Eucarístico de Lanciano II, porque lo que llamamos el Milagro de Offida realmente sucedió en Lanciano en el año 1273.

¿Por qué escogió Jesús a Lanciano por segunda vez? Cuál era la necesidad  de manifestarse Él mismo otra vez en esta ciudad en otra forma de Milagro? Para la mente investigadora y científica, tiene que haber una explicación lógica para un fenómeno como este. Pero no hay ninguna forma en la que podamos anticipar las acciones de Nuestro Señor porque ellas desafían las leyes de la lógica. Yo creo que Él lo hace intencionalmente.

A Santo Tomás de Aquino, el gran Doctor de la Iglesia y una de las mentes más brillantes que nunca haya conocido el mundo, se le dio una revelación al final de su vida. Después de esto, él paro de escribir y de dictar su gran Summa Teológica. Cuando se le preguntaba que porque abandonaba su trabajo, él contestó. “El final de mis obras ha llegado. Todo lo que yo he escrito parece no tener ningún valor después de las cosas que me han sido reveladas”. Nosotros estamos conmovidos por la perspectiva de lo que Dios nos revelará cuando le encontremos a Él en el reino. Pero hasta ese momento nosotros solo podemos especular en los misteriosos caminos de Dios. El segundo Milagro Eucarístico de Lanciano, o como es mejor conocido, el Milagro Eucarístico de Offida es uno de los misterios de Dios.

Los principales personajes en este suceso milagroso son, una pareja de recién casados, Ricciarella y Giacomo (Santiago) Stasio, su mula y una bruja. Aparentemente el matrimonio de los recién casados no se efectuó en el  cielo. Ellos no tenían nada en común. Giacomo se ocupaba más de la mula que de su esposa. No hay ninguna indicación de cuál era la causa de su problema, o si era culpa de la esposa o del esposo. Nosotros sabemos que la esposa, Ricciarella, quería una vida mejor para ellos. Ella pensaba            que si tuvieran una mejor vida sexual, serían más feliz en su matrimonio. Nunca consideró el vengarse de su esposo por el trato que él le daba, o el tener relaciones fuera de su matrimonio. Solo quería una mejor vida para él.

Para lograr esto, buscó los servicios de una hechicera local o bruja, La bruja tenía gran fama de que podía hacer que volviera el fuego a los matrimonios en los que se había terminado el ardor. La bruja le recomendó la siguiente porción:

“Ve a recibir la Comunión, pero no te tragues la Hostia. Llévala a casa, ponla en la estufa y quémala. Coge las cenizas y échalas en su vino o en su sopa. Entonces cuéntame los efectos. Tú verás el gran ardor que él te va a demostrar”

Esta descripción de como su esposo reaccionaria con la poción, le dio a Ricciarella el impulso que necesitaba para cometer ese terrible acto. Ella sabía, pues había sido creada en la fe, que eso era un Sacrilegio. Nosotros deberíamos tener curiosidad de saber como ella debió haber luchado con su conciencia antes de tomar la decisión de cometer ese horrible acto.

No sabemos la justificación que le dio a ella el valor para ir a la Iglesia y participar de la Misa y recibir a Nuestro Amado Señor Jesús en la Comunión. Su corazón palpitaba según ella mentalmente repetía el plan una y otra vez. Es el momento apropiado, Ricciarella, como una santa, fue hacia el sacerdote a recibir la comunión. Después de haber recibido la Hostia, rápidamente le dio la espalda al sacerdote para poder sacarse al Señor de la boca. Se aseguró de que nadie la viera haciendo esto.

Se fue de la Iglesia y corrió por las calles de Lanciano hasta que llegó a su casa. Sus manos temblaban violentamente. Encendió el fuego debajo de una olla de barro. Entonces cuando la olla se calentó, cogió la Hostia y la puso en ella. Empezó a salir humo, ella no podía apartas sus ojos de la perversidad que estaba haciendo. La fuerza que impidió que ella parara esa maldad, fue el cambio imaginario, que ella creía que ocurriría en su esposo, para con ella. La parte de afuera de la hostia se convirtió en carne y empezó a sangrar profundamente. El centro de la Hostia conservó su forma original. La sangre seguía brotando de la Hostia convertida en Carne.

Ella se aterrorizó. No sabía qué hacer. La sangre cubría el fondo de la olla, la cual se estaba llenando rápidamente. Cogió cera y tierra y la hecho dentro de la olla. Llenó la olla con tierra, pero la sangre pasaba a través de la tierra, subiendo hasta la parte más alta de la olla. Cogió un enorme mantel de hilo y envolvió la olla en el. No sabía donde lo iba a poner. Corrió hacia afuera al establo y cavó un hueco en el estiércol de la mula. Enterró allí el mantel y la olla con la Eucaristía adentro.

Cuando su esposo volvió a la casa esa noche, él notó que la mula estaba más terca que de costumbre. El animal no quería entrar en el establo. Giacomo estaba acostumbrado a que la mula fuera un poco obstinada, pero ésta era la vez que peor se había comportado el animal, Giacomo trató de empujar la mula y después la golpeo, pero sin ningún provecho. Finalmente él acogió un látigo y empezó a golpear al animal. Siendo el dolor más de lo que la mula podía soportar, con disgusto entró al establo dando rumbos. El animal cayó de rodillas cerca de donde se encontraba el estiércol, casi en una posición de adoración.

Giacomo nunca necesitaba una excusa para ser áspero con Ricciarella, pero si la hubiera n3cesitado, lo que pasó con la mula hubiera sido una justificación perfecta. La culpó por el comportamiento de la mula, acusándola de que había puesto algún hechizo en el establo. Le dio algunos golpes con el mismo látigo que había usado con su bestia.

Para Ricciarella esto fue vivir un infierno. Sintió una gran angustia en su conciencia por su pecado. Se dio más y más cuenta de la seriedad y las consecuencias de sus acciones. También empezó a querer saber realmente cual era el poder de la bruja, por la forma en que su esposo la estaba tratando. El resultado de su pecado, tan deseado por ella, nunca se realizó. Si alfo paso fue que la relación entre ellos se hizo más débil, mientras que los sentimientos de culpa y remordimiento se hacían más fuertes en ella según pasaban los días.

Ricciarella vivió en esa situación por siete años. La tortura que ella misma se impuso era enloquecedora. Ella creía que la forma en que si esposo continuaba tratándola era un castigo de Dios. Perdió toda la esperanza. Ella no podía aceptar el que pudiera ser perdonada por Dios. La mayor pena que ella sentía era más que nada por haber cometido un crimen tan imperdonable contra Dios, quien nunca le había hecho daño. Los cuentos del Dios Bueno que su madre le había contado cuando era una niña, se repetían en su mente. Anhelaba confesar su pecado para librarse de la carga que tenía en su corazón y en su alma. Pero no tenía valor para aceptar la vergüenza que sería para ella el confesarse con un sacerdote.

Finalmente, cuando ya no podía vivir más con la pena que ella misma se había impuesto y por la que había sufrido por siete años, Ricciarella se puso en contacto con el prelado de un monasterio Agustino en Lanciano. Este fraile había nacido en Offida, quien irá tomando importancia según la historia se va desarrollando. Ricciarella le confesó su grave pecado al sacerdote. Él la acompaño de regreso a su casa. Entraron en el establo y cavaron en el estiércol, el cual se había acumulado por siete años. Cuando el fraile tiró del mantel y descubrió lo que había, encontró que el contenido de la olla, la Carne sangrante y la Hostia habían permanecido incorruptos a través de los años.

Tomó el mantel y la olla de barro que contenía la Hostia y se los llevó. No le dijo nada a nadie del incidente. Ricciarella estaba aliviada porque su escándalo no sería regado por toda la provincia y su deteriorada relación con su esposo no  se pondría peor. Nosotros no estamos seguros de cuáles eran los motivos que tenía el fraile. Se sabe que él quería sacar el milagro Eucarístico de Lanciano. ¿Era eso porque él realmente tenía miedo de que si el Milagro se revelaba, Ricciarella estuviera envuelta en él? ¿O quería él que la gloria de un Milagro Eucarístico incorrupto se le diera a su ciudad natal, Offida?

Dando un pretexto, el fraile recibió permiso de sus superiores para dejar el monasterio. Unos días después él se fue de Lanciano en secreto. Le llevó la Hostia Sagrada al Padre Miguel Mallicani  que era el prelado del monasterio Agustino de Offida. El Padre Miguel Mallicani recibió el milagro como una propiedad de Offida, e inmediatamente construyó un santuario para Él en esa ciudad. Esto fue en el año de 1280 siete años después de que Ricciarella había cometido el Sacrilegio.

El Padre Malliani se movió rápidamente, él y otro fraile fueron a Venecia ese mismo año para edificar un hermoso relicario, el cual iba a ser la casa del Milagro Eucarístico. Le encargaron a un artífice de oro que hiciera el trabajo en secreto. Después que había terminado el hermoso relicario, y que el sacerdote había colocado el Milagro Eucarístico dentro del, los frailes se fueron en un barco para volver a Offida. Fue entonces cuando el artífice de oro decidió decirle al Duque de Venecia lo que había sucedido. El Duque, ansioso por mantener un verdadero Milagro Eucaristico para su provincia, le ordenó a un barco que interceptara al que llevaba a los dos frailes de vuelta a Offida.

¡Pero el Señor intervino! Cuando el barco del Duque estaba alcanzando a los frailes, el Mar Adriático se puso violento, permitiéndoles a los frailes desembarcar en Ancona, y volver sin peligro a su monasterio en Offida. El relicario fue instalado en la Iglesia en Offida. Hoy día todavía está allí.

¿Por qué había tanta intriga y engaño envueltos en este milagro? La Hostia Milagrosa, que se nos dio en Lanciano, fue robada por un miembro del clero y traída a Offida en otra provincia. Los frailes en Offida fueron cómplices del robo. Ellos lo arreglaron yendo a Venecia  para hacer un relicario. Esto ante sus ojos y los ojos de la ciudad le daba validez a la autoridad de Offida para guardar la Hostia Sagrada robada. ¿Por qué era esto tan importante para las personas involucradas que fueron capaces de pasar por todo lo sucedido?

En esos días y aún hoy,  una ciudad que tuviera la reputación de tener santos famosos enterrados en ella, o mucho mejor que tuviera el Milagro Eucarístico se hacía famoso. Las personas de muchas millas alrededor se congregaban para venir a venerar el milagro.

Entre más estudiamos las obras del Señor,  el pasaje de la escritura: “El Señor obra en formas misteriosas, sus maravillas son para contemplar”

“Este es mi Cuerpo, esta es mi Sangre”

Milagros de la Eucaristía

Bob y Penny Lord

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2 Comentarios

  1. Jane Sendale Carrúm C

    SEÑOR BENDITO, QUE TE QUEDAS CON NOSOTROS MANIFESTANDOTE EN LA OSTIA EUCARISTICA, CON TU CUERPO Y TU SANGRE TE DAMOS GRACIAS POR ELLO Y PERDON POR NECESITAR DE ESTAS MANFIESTACIONES . PERDONANOS SEÑOR Y TE DAMOS LAS GRACIAS POR SER MI DIOS Y MI TODO
    BENDICE AL PAPA FRANCISCO A TODOS NUESTROS SACERDOTES Y RELIGIOSOS A NUESTRA HERMANA PATY MARTINEZ Y COLABORADORES DE ESTA BENDITA PAGINA GRACIAS SEÑOR

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  2. Pedro Pinto

    Me gustaría saber por qué en el relicario sólo se conserva un pequeño fragmento de la Hostia. ¿Qué le ocurrió al resto de la Hostia? El relato dice que la Hostia se mantuvo incorrupta. Sólo se mantuvo incorrupta hasta cuando fue encontrada?

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