El Gaudium Pública: XIV ENCUENTRO DIOCESANO DE MONAGUILLOS “DIOS ME LLAMA A DAR TESTIMONIO POR MEDIO DE MI SERVICIO”.

El Gaudium Pública: XIV ENCUENTRO DIOCESANO DE MONAGUILLOS “DIOS ME LLAMA A DAR TESTIMONIO POR MEDIO DE MI SERVICIO”.

XIV ENCUENTRO DIOCESANO DE MONAGUILLOS “DIOS ME LLAMA A DAR TESTIMONIO POR MEDIO DE MI SERVICIO”.

Sábado 12 de Junio de 2010 por Emmanuel Betancourt ·

LEÓN GTO., 05 de junio de 2010.- Con la participación de más de mil 300 monaguillos de toda la Diócesis se llevó a cabo el sábado pasado en las instalaciones del Seminario Diocesano (Seminario Menor) el Encuentro Diocesano de Acólitos que organiza la Comisión de Pastoral Vocacional cuyo responsable es el Sr. Cura Cruz Felipe Esparza, en conjunto con la Promoción Vocacional del Seminario Diocesano, a cargo del P. Carlos Alberto Aguilera Sánchez con todo su equipo.

“El objetivo en sí, fue la convivencia de todos los monaguillos y hacerlos conscientes del servicio que ofrecen como un llamado de Dios, e incluso ir mostrándoles la opción, en caso de que ellos se decidan, por la vida sacerdotal y motivarlos para que convivan y así entiendan que todos somos Iglesia”, explicó el Seminarista Rogelio Ornelas, auxiliar en Promoción Vocacional.

La convivencia comenzó a las 9 de la mañana cuando en el Seminario se recibió a todos los acólitos que venían muy contentos a este encuentro. Niños, niñas y adolescentes se dieron cita desde todos los rincones de la Diócesis, representando a cada Decanato, con un registro de cerca de 60 parroquias asistentes, incluso las más lejanas.

Ya iniciado el encuentro, los monaguillos tuvieron un momento de oración comunitaria, junto con momentos de animación donde pudieron cantar y bailar. Después tuvieron actividades en grupos para jugar y divertirse al tiempo de reflexionar sobre algunos temas.

Las instalaciones del Seminario Menor se vieron casi rebasadas, llenas de vida y entusiasmo con la energía de tantos niños y jovencitos dispuestos a convivir. Las actividades se realizaron principalmente en las canchas de futbol anexas al Seminario Menor. Acompañando a los monaguillos, asistieron algunos papás o encargados de grupos de acólitos, incluso algunos sacerdotes se hicieron presentes como responsables de sus acólitos.

Varios seminaristas estuvieron acompañando a los monaguillos para este día, todo con la finalidad de promover con fuerza el sentido vocacional del encuentro.

Alrededor de las 11:30 de la mañana, llegó un momento muy esperado por los monaguillos, el traslado del Seminario a Catedral que ya se ha convertido en una tradicional peregrinación muy festiva, llena de cantos, porras y de mucha velocidad. Los niños, siendo cuidados y protegidos en todo momento por sus responsables y por agentes de tránsito, peregrinaron cantando, brincando y hasta corriendo por las calles que conducen al Parque Hidalgo y a través del todo el Blvd. Adolfo López Mateos hasta llegar a la Catedral.

Mientras esto ocurría, todos los automovilistas, peatones y locatarios veían con asombro, admiración y un gesto de alegría a tantos jovencitos vitorear a sus grupos y alabar a Dios en público sin pena alguna revestidos con sus sotanas.

A la una de la tarde inició la Santa Misa que presidió el Sr. Arzobispo Dn. José Guadalupe Martín Rábago, acompañado de cerca de diez sacerdotes más. Cabe destacar que este día fue también especial por que el Sr. Arzobispo cumplía 18 años de haber sido consagrado Obispo, motivo que compartió contento con los monaguillos.

En la homilía Mons. Martín Rábago explicó a los monaguillos, sentados incluso a sus pies, la importancia del acólito: “Yo les agradezco mucho la labor que ustedes hacen ayudando a los sacerdotes en la celebración de la Liturgia, algunos de ustedes tienen más años otros menos pero todos son monaguillos y realizan una labor muy importante para la dignidad de la Liturgia”.

Sin olvidar la pertinencia del momento para promover las vocaciones a la vida sacerdotal, hizo un sentido llamado a los corazones de los monaguillos: “Dios quiera que de muchos de ustedes, el Señor quiera sacar sacerdotes que tanto necesitamos en el ambiente de nuestra Diócesis… Si el Señor les dice ¡sígueme!, anímense a decirle, ¡sí Señor, sí Señor, si Tú quieres, yo te seguiré!, tengan por seguro que no se van a arrepentir”.

Al finalizar la Santa Misa, todos los monaguillos regresaron a sus comunidades a seguir dando testimonio de su ser de cristianos y a seguir sirviendo según su propio llamado.

Acerca del autor

Temas relacionados

3 Comentarios

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.